Marcelo Barovero: la nueva carrera del arquero multicampeón con River
Desde su retiro en el fútbol, el gran arquero riverplatense dicta charlas motivacionales a grupos, clubes, instituciones y empresas bajo el título "Perseverancia, liderazgo, resiliencia y la unión del deporte con la vida".
Fue una atajada que a él le marcó la vida y que representó un peldaño esencial para la existencia del River multiganador de Marcelo Gallardo. El 27 de noviembre de 2014, Marcelo Barovero le atajó a Emmanuel Gigliotti un penal a los cuatro minutos de iniciado el Superclásico, en el Monumental, por un lugar en la final de la Copa Sudamericana.
El entonces arquero del Millonario se lo detuvo al exdelantero de Boca y luego Leonardo Pisculichi le dio la victoria y la clasificación al conjunto dirigido por el Muñeco, con un gol anotado a los dieciséis minutos del primer tiempo.
Recientemente retirado del fútbol, Barovero recuerda aquella acción que lo catapultó para siempre al Olimpo riverplatense como una enseñanza perfecta para todos aquellos que persiguen sueños u oportunidades de cualquier índole: entremezcla sus vivencias deportivas con la vida misma y prepara un cocktail innovador para todos los que lo quieran escuchar.
A los 40 años, Trapito se reinventó: desde hace poco menos de un mes brinda charlas motivacionales a grupos de personas, clubes, instituciones y empresas bajo el título "Perseverancia, liderazgo, resiliencia y la unión del deporte con la vida".
"Por las circunstancias y por el tiempo de desarrollo del partido, aquel penal contra Boca muestra todo lo que hay que prepararse para lo que uno desea. Uno quizás está años y años persiguiendo algo y nunca sabe cuándo va a llegar. Y en el momento en que llega esa chance, hay que estar a la altura, hay que estar preparado. Es una de las cosas que intento enseñar a través de mis charlas. Es clave el componente mental para responder a una circunstancia que nunca se ha vivido. Hay que tratar de minimizarla a pesar del entorno y la tensión que se respira, y recordar que no deja de ser una jugada. La clave es encontrar la lucidez ante tanta adrenalina. Y eso se puede aplicar a todos los órdenes de la vida", reflexiona Barovero en diálogo con Infobae.
Ya sin los guantes, pero con micrófono, saco y camisa en su look, Barovero se transformó en un disertador que aboga por el perfeccionamiento constante para que las personas se desarrollen en todos los ámbitos de la vida. Y pone el siguiente ejemplo para explicar su postura alejada de la famosa zona de confort:
"Hay jugadas de un partido en las que uno no responde como quiere pero igual obtiene buenos resultados. Por eso hay que tener la objetividad suficiente para entender que lo que ese día alcanzó, quizás la próxima vez sea insuficiente. Por eso hay que buscar una mejora constante en las cualidades técnicas. Y eso también aplica a la vida en general: tenemos que tratar de mejorar y de perfeccionarnos en todos los órdenes".
El ciclo que comanda el exarquero se llama "Saliendo del área" y lo lleva adelante junto a su representante y amigo personal, Rodrigo Sbroglia
El ciclo que comanda el exarquero se llama "Saliendo del área" y lo lleva adelante junto a su representante y amigo personal, Rodrigo Sbroglia, quien supo ser el asistente de Gallardo en River entre 2014 y fines de 2018. "En esta inspiradora charla, Marcelo compartirá su viaje desde sus primeros días en el fútbol hasta convertirse en un arquero reconocido. A través de su historia, recorrerá temas como la perseverancia, el liderazgo, la resiliencia y la unión del deporte con la vida. Una oportunidad única para conocer sus valores y experiencias que lo llevaron a la cima", puede leerse en los flyers de presentación de las charlas de Barova.
En esos encuentros, también repasa su carrera futbolística y aspectos de su vida privada, como la relación con sus padres y sus vínculos familiares.
"Empecé a transitar otro camino porque aprendí que la vida es como un partido: por más que lo puedas imaginar de mil maneras diferentes, siempre te traerá alguna historia nueva", remarca el exAtlético de Rafaela, Huracán, Vélez, River y Banfield, entre otros clubes.
Barovero aborda el aspecto deportivo en profundidad en sus charlas. Por caso, recientemente dio una en el club Acassuso, de la que participaron directores técnicos y arqueros de todas las categorías, así como también dirigentes del club que milita en la Primera B Metropolitana.
Allí, entre otras cosas, destacó la importancia de que todo plantel tenga un entrenador de arqueros y resaltó el valor que tienen los referentes en todos los equipos. También realizó un recorrido por los diferentes clubes en los que jugó, por sus mejores campañas, por sus atajadas más recordadas y también evocó algunos malos momentos que le sirvieron de enseñanza.
De personalidad introvertida, Barovero dice sentirse "cómodo" al disertar sobre el fútbol y la vida. "Intento transmitir mis experiencias y eso me gusta. Otro de los temas de los que hablo es cómo uno llega a ser referente de un vestuario y qué significa eso. Cómo guiar a un grupo con el paso de los años, cómo llegar a tener la templanza para manejar situaciones grupales en un ámbito tan competitivo y con tantas tensiones como el del fútbol", remarca el exarquero que en el exterior atajó en Necaxa, Monterrey y Atlético San Luis, de México, y en Burgos, de España.
Al resaltar la importancia que tienen los entrenadores de arqueros en los cuerpos técnicos modernos, Barovero sostuvo: "Un entrenador te puede ayudar a mejorar de manera constante. Más allá de la edad que tenga cada uno, siempre se puede seguir creciendo y mejorando constantemente. El de arquero es un puesto que no tiene límites".
Barovero anunció su retiro del fútbol el 18 de julio del año pasado, tras conseguir un total de catorce títulos a lo largo de la carrera. Seis de ellos fueron en River, club en el que celebró la Copa Libertadores 2015 y la Sudamericana 2014, en ambos casos con Gallardo como entrenador.
Su despedida de las canchas se produjo poco más de tres meses atrás con la camiseta de Banfield: el 26 de mayo fue titular en el partido que el Taladro perdió 3 a 0 ante Gimnasia y Esgrima, en La Plata. Un resultado que no se corresponde con la exitosa carrera que supo tener uno de los últimos grandes arqueros que dio el fútbol argentino.
Fuente: Medios