Condenaron a prisión perpetua a Pablo Parra
Para el jurado popular, Parra mató a Agustina en un homicidio agravado por violencia de género, cometido por un hombre contra una mujer.
Pablo Parra, el vecino de la joven Agustina Fernández, fue declarado culpable del femicidio de la estudiante de medicina. Tras un fallo unánime del jurado popular, hoy se le impuso la pena de prisión perpetua, la única establecida por el Código Penal para este tipo de delito, el más grave del sistema penal.
Luego de dos semanas de juicio, el jurado popular determinó la culpabilidad de Parra. A pesar de su proclamación de inocencia en la última audiencia, las pruebas presentadas por los peritos fueron concluyentes.
Para los 12 jurados, Parra mató a Agustina en un homicidio agravado por violencia de género, cometido por un hombre contra una mujer. Por ello, la prisión perpetua era la única alternativa. Parra ha estado detenido con prisión preventiva desde el 23 de diciembre de 2022, para evitar su fuga o interferencia en la investigación. Tras el fallo, esta medida cautelar fue ratificada.
El juez técnico, Guillermo Baquero Lazcano, escuchó los argumentos de los abogados de Parra. "Mantenemos las reservas de impugnación", afirmó Juan Manuel Coto, quien argumentó que "pese al respeto que nos merecen los jurados, entendemos que es un veredicto contrario a la prueba". La defensa también cuestionó la no admisión del testimonio de una expareja de Parra y cómo se comportó en otras relaciones.
El jurado llegó a su veredicto el 15 de abril, después de dos semanas de testimonios, principalmente de peritos y amigos de Agustina. La joven de 19 años, que había llegado a Cipolletti para estudiar Medicina, fue atacada brutalmente en su departamento en Confluencia al 1300.
La querella siempre sostuvo que Parra tenía una obsesión por Agustina, la cual explotó la tarde del ataque, después de que ella pasara la siesta con un nuevo amor. Según la acusación, Parra invitó a cenar a Agustina, salió a comprar provisiones y, al regresar, la encontró agonizando. Afirmó que había sido un robo.
Para la querella, Parra dejó su auto a unas cuadras, regresó caminando, entró por la parte trasera del edificio y atacó a Agustina. Montó una escena para desviar la investigación, pero las únicas huellas en el departamento eran suyas.
Además, un pedazo de tela con su ADN fue encontrado en el alambre del fondo. Una cámara de seguridad captó a una persona con sus características físicas caminando hacia el departamento y luego en sentido contrario. Para los investigadores, ese hombre de negro era Parra.
El juez concluyó: "Paso a adelantar el contenido de la sentencia por motivo de este juicio de cesura. El veredicto no puede ser otro que el de la prisión perpetua, que es la única posible para este tipo de delitos. Entonces, esa es la condena".
Pablo Parra fue condenado a prisión perpetua por el femicidio de Agustina Fernández, una sentencia que refleja la gravedad del delito y la determinación del sistema judicial para hacer justicia.
Fuente: Medios