Milei no avanza con privatizaciones: solo una empresa estatal inició su cierre

A pesar de haber sido una de las principales promesas de campaña, en su primer año de gestión, el presidente Javier Milei no avanzó en privatizaciones de empresas públicas. De las 45 empresas estatales que emplean a casi 100.000 personas, solo una inició su proceso de cierre, mientras que algunas incluso incrementaron su dotación de personal.

Durante su campaña electoral de 2023, Milei había prometido privatizar Aerolíneas Argentinas, YPF, Trenes Argentinos, Correo Argentino y AYSA. Sin embargo, en algunos casos, la Ley Bases sancionada por el Congreso impide esa posibilidad, como sucede con Aerolíneas Argentinas, cuya única alternativa sería su cierre.

En cuanto a las empresas en las que sí se podría avanzar hacia la privatización, no se han registrado avances concretos hasta el momento.

Al ser consultadas sobre los retrasos, fuentes oficiales explicaron que "cada empresa enfrenta situaciones administrativas particulares que deben resolverse, lo que provoca variaciones en los tiempos". 

No obstante, recalcaron que el objetivo sigue siendo el mismo: "El paradigma no es gestionar las empresas de manera eficiente, sino que el Estado se retire".

Avances en el proceso de desvinculación estatal: privatizaciones, cambios y cierres

La Agencia de Transformación de Empresas Públicas, bajo la dirección de Diego Chaher, es la encargada de este proceso. Según los datos disponibles, las privatizaciones más avanzadas son las de la industria IMPSA y la aeronáutica Intercargo.

En el ámbito de las concesiones, se han iniciado procesos en rutas, el tren Belgrano Cargas y la Hidrovía. En cuanto a los cierres, se considera que ya se han cerrado Télam, Casa de la Moneda y Decahf.

Sin embargo, a pesar de los anuncios, Télam y Casa de la Moneda siguen operando. Télam, aunque fue renombrada como Agencia de Publicidad del Estado, ha reducido considerablemente su personal.

En diciembre de 2023, la cablera estatal contaba con 793 empleados, pero en noviembre de 2024 el número había caído a 178, lo que representa una disminución del 78%.

Por su parte, a principios de octubre, se anunció la reestructuración de Casa de la Moneda. En diciembre de 2023, la empresa contaba con 1.411 empleados, mientras que en octubre, mes del anuncio, su plantilla era de 1.310 trabajadores.

En noviembre, la cifra bajó a 1.297 empleados, lo que representa una reducción del 1% respecto al mes anterior.

La única empresa que realmente se cerró fue Decahf, una compañía estatal encargada de gestionar el capital humano para Trenes Argentinos, que llegó a tener más de 1.000 empleados. 

Su cierre formal fue publicado en el Boletín Oficial el 17 de diciembre. Al momento del cierre, contaba con 177 trabajadores, cifra que representa una caída del 84% en su dotación de personal desde diciembre de 2023, según datos del INDEC.

Lo curioso es que Decahf tenía 470 empleados en septiembre, y tras anunciarse su cierre en octubre, en noviembre quedaban solo 177 personas, con una reducción de 293 empleados. 

En contraste, Ferrocarriles Argentinos (FASE), otra empresa vinculada al sector ferroviario, incrementó su plantilla de manera significativa, pasando de 89 empleados en octubre a 344 en noviembre, con una incorporación de 269 personas.

Variaciones en el personal en las empresas estatales: contrataciones y despidos 

Ferrocarriles Argentinos (FASE) destaca como la empresa estatal que más incrementó su dotación de personal. De 74 empleados en diciembre de 2023, pasó a 344 trabajadores en noviembre, lo que representa un aumento del 365% en un año. 

Otras empresas que experimentaron incrementos fueron Pellegrini, que administra fondos de inversión y creció un 9% (de 44 a 48 empleados), y la Termoeléctrica Manuel Belgrano, que subió un 2% (de 82 a 84 trabajadores).

Algunas empresas, como Nación Servicios, que gestiona la SUBE, mantuvieron su plantilla estable con 1025 empleados.

Desde Ferrocarriles Argentinos explicaron que el notable aumento de personal se debió a la absorción del personal técnico de Decahf, tras su cierre. Este personal fue destinado a áreas como el Museo Nacional Ferroviario, el Centro Nacional de Capacitación Ferroviaria (Cenacaf), los talleres de Junín y el archivo ferroviario. 

Aseguraron que solo un tercio de los empleados de Decahf fueron considerados como capacitados, y señalaron que la empresa estaba sobrecargada de personal por favores políticos.

En cuanto a otras empresas, aquellas que el gobierno había señalado para posibles cierres o privatizaciones durante la campaña electoral, han tenido pocos cambios en su dotación de personal. 

La Televisión Pública, por ejemplo, registró una caída del 5%, pasando de 2427 a 2311 empleados, y el Banco Nación vio una disminución del 3%, de 17,688 a 17,191 trabajadores.

Las empresas donde más se redujo la dotación de personal fueron: ADIFSE (Administración de Infraestructura Ferroviaria), que redujo su personal en un 31%, Correo Argentino (-26%), la Administración General de Puertos (-24%), el Banco BICE (-25%), Fabricaciones Militares (-20%) y Aysa (-18%).

El Gobierno mantiene un particular interés en privatizar Aysa, siendo la única empresa de servicios públicos a la que se le otorgaron los aumentos reglamentarios. 

Sin embargo, a partir de enero, el Ministerio de Economía interviene por primera vez en la tarifa del agua, autorizando un incremento del 1%, cuando según la fórmula establecida, el aumento debería haber sido del 3%.

En cuanto a las 45 empresas estatales del país, según datos del INDEC, la reducción de personal durante el último año fue del 11,8%. En diciembre de 2023, estas empresas empleaban a 110.168 personas, y actualmente la cifra se redujo a 97.166 empleados.

La promesa de privatización: ¿qué empresa tiene en la mira Milei?

El Gobierno espera que la primera privatización se concrete en la empresa metalúrgica Impsa, ubicada en Mendoza. La intención original era realizarla en diciembre, cerrando así el primer año de gestión con esta privatización.

El proceso legal avanzó con la estadounidense Arc Energy como la compañía interesada, y ya se presentó la oferta correspondiente. Sin embargo, las negociaciones se complicaron por la deuda de más de US$500 millones que la empresa tiene.

En cuanto a avances, el Gobierno actuó a través de la Comisión Nacional de Valores (CNV), modificando una normativa que facilita las privatizaciones cuando las empresas pasan a formar parte del mercado de capitales. 

Sin embargo, aún no está clara la estrategia de venta: se desconoce si se optará por la liquidación de activos o la venta de acciones, lo que determinará la forma en que se licitará la privatización.

Fuente: Medios