Neuquén: desde que comenzó el verano siete personas murieron ahogadas en ríos y lagos
Algunos accidentes se produjeron por exceso de confianza de los bañistas, desconocimiento del lugar o por meterse en sectores no habilitados para refrescarse.
La temporada de verano, que por las altas temperaturas arrancó mucho más temprano, está dejando el doloroso saldo de personas ahogadas, principalmente por imprudencias o exceso de confianza a la hora de disfrutar de los espejos de agua y ríos de las provincias de Neuquén y Rio Negro.
El pasado 5 de diciembre, una intensa ola de calor acercó a muchas personas a las costas del río Limay. Solamente en ese fin de semana se realizaron seis rescates. Un hombre tuvo que ser derivado al hospital Castro Rendón. Policía y Prefectura tuvieron que intervenir porque un grupo de jóvenes se arrojaban al agua desde el puente de calle Río Negro. Afortunadamente, en esa oportunidad no se lamentó ninguna víctima.
Sin embargo, semanas después, el pasado 19 de diciembre, miembros de un operativo de rescate integrado por Prefectura, Bomberos y Protección Civil de Cipolletti y Fernández Oro, hallaron en las aguas del Río Negro, a la altura de Paso Córdoba, el cuerpo de Hernán Gerónimo Olivera, el hombre de 36 años que había desaparecido en el río tres días antes en la Isla Jordán, Cipolletti.
El hombre era oriundo de Buenos Aires, pero desde hace ocho meses vivía en la región y trabajaba en un conocido supermercado de Neuquén. Pasadas las 18:30 del viernes 16 de diciembre, se activó un alerta después de que el bañista fuera arrastrado por la corriente cuando intentaba cruzar un brazo del río que tenía más caudal que de costumbre.
En la cordillera
El 28 de diciembre del 2022, después de varios días de intensa búsqueda, la Intendencia del Parque Nacional Nahuel Huapi informó que pasadas las 13, encontró en la zona de Alicurá y Confluencia Traful, el cadáver de Néstor Nahuel Vines, un joven neuquino de 19 años que había desaparecido dos días antes, tras arrojarse al río Limay.
La dramática situación sucedió minutos antes de las 12. Al no emerger, sus padres, que lo esperaban en la orilla, dieron aviso al guardaparques de la seccional más cercana, a brigadistas y empleados de Prefectura Naval, quienes iniciaron la búsqueda. Néstor estudiaba en el CPEM 25 y se encontraba de vacaciones en la cordillera.
El mismo día, oficiales de la Policía y de Prefectura Naval encontraron en el lago Nahuel Huapi, el cuerpo de Liliana Mabel Crosetto, mujer de 65 años que residía en Villa La Angostura y que se encontraba desaparecida desde hacía dos días.
El cuerpo fue encontrado cerca de un muelle donde estaban sus pertenencias: un mochila con su ropa y sus sandalias. También una botella de champagne vacía. La mujer vestía una malla. Se desconocen el contexto que dio lugar al deceso.
Villa Pehuenia-Moquehue
El pasado domingo 8 de enero un policía de 24 años murió ahogado en el lago Moquehue, en el sector conocido como Bella Durmiente. Oriundo de Zapala, efectivo con jerarquía de cabo, desempeñaba sus funciones en la Comisaría 21 del barrio Melipal en Neuquén capital.
De acuerdo a lo que informaron testigos a la Policía, el joven se tiró al lago en un sector en el que hay una profundidad de aproximadamente 8 metros. Por causas que se desconocen, comenzó a hundirse y no pudo salir. Lo rescataron, pero ya sin vida. Posteriormente, un médico policial pudo constatar que la muerte fue causada por asfixia por inmersión.
Centenario
En tanto, en la mañana de este martes 10 de enero, personal de la Comisaría 32° de Cipolletti encontró el cuerpo de Agustín, un joven de 22 años que era buscado intensamente desde el domingo por la tarde, luego de que intentara cruzar el río Neuquén, en zona Barrio Nueva España-Prima Terra, en el límite entre Neuquén y Centenario. El hallazgo tuvo lugar en el margen oeste del Tercer Puente.
En medio de una salida en familia para aliviar el sofocón por las altas temperaturas que azotaron a la región, alrededor de las 18.40 el joven decidió sumergirse en el agua para cruzar el río nadando, ya que no era tanta la distancia, pero nunca emergió.
En ese momento, se estimaba que podía haberse ahogado por la corriente.
El Chocón
Al día siguiente, un turista de 43 años, proveniente de la localidad bonaerense de Temperley, murió ahogado luego de arrojarse a las aguas del Limay, a la altura de Puesto Guevara, para salvar a sus hijos que eran arrastrados por la corriente.
El trágico episodio tuvo lugar a las 14.30, el visitantes disfrutaba el día con su familia a orillas del Limay, aguas abajo de la Central Hidroeléctrica de Villa El Chocón. Aunque el área no está habilitada como balneario, son muchos los que aprovechan las aguas frescas del río para buscar alivio ante las altas temperaturas.
De manera inmediata, al ver que el hombre se hundía, los bañistas dieron aviso a la Policía, que inició el operativo de búsqueda unos minutos después, y con colaboración de diversas fuerzas de seguridad como Gendarmería, Prefectura y Defensa Civil Municipal. Tras un intenso trabajo, a las 19:30 pudieron hallar el cuerpo sin vida del turista.
Tras relatar lo sucedido, el comisario inspector Sergio Vega, que coordinó el operativo de rescate, recordó la importancia de respetar los carteles indicativos para evitar meterse al agua en sectores no habilitados. Agregó que aguas abajo de la represa se suelen producir cambios bruscos en los niveles del río, según los horarios de funcionamiento de la central. Por eso, Puesto Guevara es una zona arbolada que resulta atractiva para pasar la tarde o compartir una merienda, pero que no es apta para refrescarse en el río.
"Hay personas que concurren de manera habitual y creen que conocen la zona, pero cuando las turbinas se ponen en funcionamiento erogan mucha agua hacia el río y eso también produce cambios en el fondo y genera pozones o remolinos", advirtió, por su parte, Nicolás Di Fonzo, intendente de Villa El Chocón.
El jefe comunal remarcó que, como es habitual, este lunes, cuando se produjo el accidente- las sirenas sonaron porque las seis turbinas de la central se habían puesto en funcionamiento. "A partir de que suenan las sirenas, los turistas tienen 15 minutos para ponerse a resguardo porque va a haber cambios en el agua", indicó para luego expresar su pesar por la situación y agregar que hacía unos cuatro años que no lamentaban una muerte en las aguas del río.
En ese marco, recordó la importancia de tomar recaudos en estos espacios, que suelen causar tragedias en medio de las temporadas de alta demanda turística.
Una muerte en Viedma
A cinco días del inicio del 2023, la comunidad de Viedma quedó completamente consternada, luego de que se conociera la muerte de un niño de 13 años en el río Negro. Según informó el medio VDM Noticias, el hecho tuvo lugar el miércoles por la tarde, cuando el menor y su familia disfrutaban del día en la costa del río, en la zona del muelle ubicado sobre calle Colón.
Una de las versiones, la cual fue dada por fuentes policiales, indicaba que el niño fue perdido de vista por sus familiares y que luego de sumergirse, no pudo salir del agua. La otra versión señala que el pequeño estaba en la orilla junto a su abuelo y que, tras descompasarse, habría caído al agua.
Tras ser rescatado y la intervención de Policía y del SIARME para reanimarlo, el chico falleció camino al hospital. El triste hecho se dio en medio de una jornada en la cual los guardavidas se manifestaron frente a la municipalidad de esa localidad, reclamando por más personal para prestar servicios y más seguridad en las playas.
Fuente: LMNeuquén
