Un hombre quiso limpiar un canal en un campo y desató un incendio que consumió 400 hectáreas
Tras dos noches iluminados con las llamas de la vegetación nativa, los brigadistas de Manejo del Fuego en la tarde de este sábado lograron contener y extinguir el incendio. Quedó personal en la prevención de rebrotes ígneos.
Las llamas que dolieron en el alma en la tarde del sábado, después de jornadas de sacrificada labor, lograron ser "domadas" por brigadistas de la Zona Centro Loncopué y de la Zona Norte Chos Malal del Sistema Provincial de Manejo del Fuego. El incendio se había desatado hace tres días, a pocos kilómetros de la traza de la Ruta Provincial 26, entre Loncopué y Caviahue.
El brigadista José Antonio Tapia informó que "el fuego está contenido desde las 18 horas de hoy. Sin embargo los brigadistas aún permanecen en el lugar en guardia de cenizas porque tenemos mucho viento en la zona y se han producido algunos rebrotes que lograron ser sofocados rápidamente".
Agregó que "para llegar a este punto fue vital el trabajo de los brigadistas sobre tierra y los dos medios aéreos que estuvieron tirando agua durante toda la jornada". Hay que mencionar que se trató de un avión hidrante y de un helicóptero portando un cubo bambi.
Guardia de cenizas
El incendio forestal en Cajón de Hualcupen se declaró el último jueves desde las 15 horas y desde entonces medio centenar de brigadistas de Manejo del Fuego y personal de bomberos y policías de las localidades de Loncopué y Caviahue, grupo Hualcupen de Gendarmería Nacional y personal de salud del SIEN trabajaron incansablemente para llegar a una exitosa contención del incendio y en horas más la total extinción del fuego.
Así lo confirmó Tapia, quien además cumple el rol Coordinador de la zona centro (Loncopué) de Manejo del Fuego.
"El incendio forestal está contenido pero eso no quiere decir que tengamos un rebrote y se pueda prender de vuelta y pasa a descontrolarse nuevamente. Por esta razón se siguió trabajando sobre puntos calientes para en algún momento poder extinguirlo completamente".
Asimismo, el brigadista comentó que estas tareas de prevención se denominan Guardia de Cenizas. Además contextualizó la situación remarcando que para enfriar la zona se continuó hasta bien entrada la tarde trabajando con los medios aéreos tirando agua.
Los bomberos de Caviahue
Este lamentable incendio en su totalidad consumió unas 400 hectáreas de vegetación compuesta de matorrales nativos de baja altura como ñires, piche y coirón; entre otros. Para su contención y prácticamente extinción trabajaron también bomberos voluntarios de la central 30 de Caviahue, a cargo del jefe del cuerpo activo; Esteban Monteagudo.
"El viernes después de muchas horas de combate no logramos contener el fuego por el viento. Hoy sin viento y con la colaboración del helicóptero hidratante prácticamente ya lo hemos extinguido", afirmó el bombero voluntario.
Profundizando en el accionar de los brigadistas durante las tareas del viernes, Monteagudo señaló que "el fuego en algunos momentos estuvo incontrolable y llegó hasta las banquinas de la ruta provincial 26. Afortunadamente lo pudimos contener y no cruzó a la orilla opuesta pero si siguió su curso peligrosamente a un galpón que Vialidad provincial tiene en ese sector". Aquí destacó el accionar de todos los brigadistas que con un trabajo mancomunado y articulado evitaron cualquier daño en personas y en bienes materiales.
Por otra parte, cabe recordar las declaraciones a este medio de José Antonio Tapia, quien de alguna manera explicó las circunstancias que dieron origen a este triste incendio forestal: "Lo más importante para decir que esto no fue por la caída de rayos. Esto fue por un accidente de un muchacho del campo que estaba haciendo un canal y como en la guía de ese canal había una mata y supuestamente para no sacarla con pala le prendió fuego y ahí con el viento reinante se le fue de las manos", resaltó.
Fuente: Medios.