Trágico final: habrían hallado el cuerpo de Rosana Artigas en el río Limay
Confirmaron que fue ubicado un cuerpo en las aguas del río Limay, en la zona de China Muerta. Han trabajado agentes de Seguridad Personal y la fiscalía de Homicidios de la investigación de este crimen.
El cadáver de Rosana Artigas fue hallado este viernes por la tarde. Según los primeros datos, el cuerpo fue ubicado en las aguas del río Limay, en la zona de China Muerta.
La mujer estaba desaparecida desde el pasado jueves 23, en Plottier.
El cuerpo estaba adentro de un recipiente de 200 litros. Los investigadores habrían ubicado en registros fílmicos que el sospechoso, la ex pareja de Rosana, retiró el tacho de aceite de la casa de un familiar un día antes de la desaparición de la mujer.
La línea investigativa habría ubicado que trasladó el recipiente el mismo jueves 23, el último día en que se la vio a Rosana con vida, en horas de la tarde rumbo a la zona de China Muerta, accediendo por la zona próxima a la feria del Mangrullo al fondo.
En el lugar trabajaba personal del Departamento de Seguridad Personal de la Policía, además del titular de la fiscalía de Homicidios, Agustín García, como la fiscal del caso, Lucrecia Sola.
El ex en la mira desde el primer momento
Más temprano, a José Fernández le habían confirmado la prisión preventiva por falso testimonio , debido a sus constantes contradicciones en las diferentes testimoniales.
Fernández fue el último en ver a Rosana con vida el jueves 23 y luego dejó la localidad de Plottier, siendo visto y detectado por las antenas telefónicas de la zona del ex peaje de Centenario entre las 10:52 y las 11:01 de ese día, aunque dijo que no se había alejado en todo el día.
El 23, día de la desaparición, dijo que había ido a buscar a su madre a la casa y la llevó a un centro de día para jubilados y de ahí se fue a ver un trabajo de plomería al barrio Venecia, en Plottier, donde estuvo desde las 9:20 hasta las 10:20 que se retiró porque nadie lo atendió.
Después, brindó un derrotero de eventos fácilmente comprobables. Fue a cargar combustible a la YPF de Constituyente y Avenida del Trabajo de Plottier. Pagó 2.500 pesos en efectivo. De ahí pasó a comprar pan y volvió a su casa y a las 12:30 fue a buscar a la madre y la llevó a lo del hermano.
Así se repiten otros eventos, que son coartadas comprobables. Pero los investigadores descubrieron en base a testimonios, cámaras y geolocalización de celulares que Fernández mentía. Y la mentira importa y mucho porque busca ocultar algo. En este caso, a Rosana.
La secuencia final
La fiscalía de Homicidios y el departamento de Seguridad Personal pudieron reconstruir lo que se denomina "la última secuencia de Rosana". Eso fue posible gracias a la ayuda de cámaras de seguridad, testimonios, los impactos de los celulares en las antenas de telefonía y las horas de trabajo de campo y análisis que realizaron pesquisas y fiscales.
¿Qué se sabe? Que el 23 de noviembre Rosana le envió un mensaje a Fernández a las 9:20. Las cámaras relevadas confirman que Fernández buscó a Rosana en su casa y luego fueron a la suya.
Está el testimonio de una vecina que los vio y que luego se replicó en la audiencia de formulación de cargos donde Fernández sonrió con cinismo frente a los fotorreporteros.
Las antenas de telefonía también ubican a ambos en el lugar y a las 10:52 impactan en una antena de Centenario que coincide con la imagen que devuelve las cámaras de seguridad ubicadas a la altura del ex peaje de Centenario. Justo a esa hora, 10:52, el celular de Rosana se apaga y a la fecha no ha sido localizado.
El vehículo que manejaba Fernández es un Chevrolet Corsa color gris oscuro con vidrios polarizados y portaequipaje. Las cámaras no solo tomaron al vehículo, sino también la patente que se correspondía con el auto de Fernández.
Además, también lo tomaron cuando a las 11:03 vuelve a pasar por el mismo lugar, pero ahora en dirección a Neuquén. Más tarde, hubo cámaras que lo detectaron camino a China Muerta.
Fuente LMNeuquén