Tras días de incertidumbre, confirmaron la identidad del hombre ahogado en el río Neuquén
La autopsia determinó que no hubo signos de violencia, y se esperan estudios complementarios para esclarecer las causas de su muerte.
Este sábado se confirmó la identidad del cuerpo hallado el 29 de enero en el río Neuquén, a la altura de Vista Alegre. Tal como se sospechaba, se trata de Cristian González, el trabajador entrerriano que la semana pasada intentó cruzar el río a nado desde la localidad rionegrina de Contralmirante Cordero y que estaba desaparecido desde entonces.
Desde el Ministerio Público Fiscal (MPF) informaron que la causa de la muerte aún no ha sido determinada y que se solicitaron estudios complementarios para establecer si se trató de un caso de asfixia por sumersión. Sin embargo, la autopsia confirmó que no se encontraron signos de violencia que indiquen la participación de terceros.
Sobre la recuperación del cuerpo
El cuerpo del hombre ahogado fue retirado el jueves 30 de enero, tras más de 14 horas de intenso trabajo. La principal dificultad fue la inaccesibilidad del lugar. Había sido hallado en la tarde del miércoles en aguas del cauce, a la altura de Vista Alegre.
Bomberos Voluntarios de Centenario comenzaron el operativo el mismo día del hallazgo, pero debieron continuar al día siguiente para poder extraer el cuerpo cerca de la calle Prima Terra, también conocida como calle 0.
Según explicó el jefe del cuartel de Centenario, Patricio Álvarez, la tarea se complicó debido a la fuerte correntada y la ubicación en la que había sido arrastrado.
Álvarez relató que Prefectura les avisó sobre la presencia del cuerpo en el agua, pero al llegar advirtieron que el sector era extremadamente peligroso para los rescatistas. Por ello, se resolvió ingresar con una embarcación y personal especializado.
En un primer intento, trabajaron a la altura de calle 7, en un sector con una gran cantidad de olivillos que dificultaban el acceso. Para abrirse paso hasta el cauce del río, fue necesario el uso de machetes y motosierras
Una historia desgarradora
La víctima había llegado desde Entre Ríos junto a un grupo de trabajadores, entre ellos su hijo Javier, de tan solo 15 años, para la temporada de cosecha de fruta. Se habían incorporado a un establecimiento en la zona de Contralmirante Cordero, pero las condiciones laborales eran precarias.
Según trascendió, el empleador los mantenía hacinados y sin garantías mínimas, además de incumplir con el pago de sus salarios. Incluso, los trabajadores denunciaban que no tenían dinero suficiente para comprar alimentos.
Ante esta situación, González y sus compañeros decidieron cruzar el río con la esperanza de encontrar un empleo mejor remunerado en la provincia de Neuquén.
"Ellos cruzaron porque iban a buscar trabajo al otro lado, querían irse de ahí porque no estaban ganando nada y ni siquiera les daban dinero para comprar comida", dijo Miguel, hermano de González
Ese miércoles, con temperaturas extremas que rondaban los 37 y 38 grados, Cristian y otros compañeros se arrojaron al agua para cruzar nadando hasta la costa neuquina.
Sin embargo, cuando sus compañeros ya habían llegado a la orilla, él se agotó en medio del río y comenzó a gritar pidiendo ayuda. Intentaron socorrerlo, pero la fuerte correntada lo arrastró y desapareció en el agua.
Fuente: Medios