Un policía de Villa Regina fue detenido en Brasil por un grave incidente de tránsito
El policía, que se hallaba de vacaciones con su familia en Brasil, tuvo un altercado de tránsito y rompió el parabrisas de otro conductor y sacó un cuchillo. Cómo terminó el conflicto.
Un violento policía rionegrino protagonizó un episodio que terminó con su detención en Brasil. El uniformado oriundo de Villa Regina, le reventó el parabrisas a un automovilista durante sus vacaciones, luego huyó con la complicidad de su pareja y ante la presencia de sus hijos menores que esperaban dentro del Ford Focus patente argentina.
El hecho ocurrido el pasado viernes, cuando Juan Manuel Donia, un policía de 40 años, reaccionó de manera violenta tras un leve roce de tránsito durante su viaje a Brasil para pasar las vacaciones.
El incidente ocurrió cerca del mediodía en la localidad de Caçapava do Sul, en el estado de Río Grande do Sul. Según la denuncia del conductor brasileño, el enfrentamiento comenzó cuando Donia, visiblemente alterado, descendió del Ford Focus en el que viajaba junto a su familia y, en un arranque de furia, sacó un cuchillo.
Ante la amenaza, el automovilista brasileño comenzó a grabar la escena con su celular, captando en video el momento en que Donia, arrojó con fuerza una piedra contra el parabrisas del vehículo.
"¿Por qué haces eso si tengo seguro?", preguntó el conductor brasileño, a lo que Donia, sin mediar palabra, se subió a la parte trasera de su auto y su mujer arrancó a toda velocidad. Pese al intento de fugarse, la víctima logró alertar a las autoridades y, con la información proporcionada, se activó un operativo de búsqueda.
El vehículo argentino fue interceptado a más de 250 kilómetros del lugar del incidente, en las cercanías de la ciudad de Gravataí, cuando Donia y su familia ya se dirigían hacia el litoral de Porto Alegre. Allí, el policía fue detenido por la Policía Rodoviaria Federal y conducido a la Policía Judicial de Gravataí, acusado del delito de daño.
En el vídeo se puede apreciar como Donia actuó de manera brutal en presencia de su esposa y dos hijos menores, quienes fueron testigos de la agresión. El policía rionegrino cuenta con antecedentes de una condena firme hace una década por lesiones leves.
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