Baja el precio de la carne pero los argentinos comen menos asado, ¿por qué?
El último informe del INDEC confirma que los precios del asado siguen bajando. Sin embargo, los argentinos cada vez consumimos menos carnes rojas.
Este viernes, los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) muestran que el índice de precios al consumidor (IPC) en junio fue del 4,6%, un aumento de cuatro décimas respecto a mayo. El precio del asado se mantuvo casi congelado, aumentando solo un 0,2% en junio, y ha estado perdiendo valor frente a la inflación durante todo el año.
A pesar de la baja en los precios, el consumo de asado sigue disminuyendo. Juan Carlos, padre de una familia en Neuquén capital, solía comprar carne de La Pampa todos los domingos para armar un asado familiar. Esta tradición se ha reducido a una o dos veces al mes debido a la pandemia y a razones económicas.
"En los últimos tres años, mi salario no ha seguido el ritmo de los precios de los alimentos y tuvimos que restringir ciertos privilegios... el asado fue uno de ellos", confesó.
Estadísticas y Realidades
Las estadísticas oficiales reflejan que el asado es uno de los productos que menos ha aumentado en precio comparado con otros cortes de carne. Aun así, la demanda no ha reaccionado a la baja de precios. El analista ganadero Víctor Tonelli explica que la menor oferta de carne vacuna es la principal causa de esta reducción en el consumo.
La producción ha caído de 3,3 millones de toneladas a menos de 3 millones proyectadas para este año.
Factores que Influyen en la Baja del Consumo de Asado
Cambios en los Hábitos de Consumo: Las familias están cambiando sus hábitos alimentarios, optando por un mayor consumo de frutas y verduras.
Poder Adquisitivo: La pérdida de poder adquisitivo de las familias argentinas ha sido significativa, impactando en el consumo de alimentos. Aunque el precio del asado ha bajado, sigue siendo caro para muchas familias.
Cortes más Productivos: El asado es el corte menos productivo, ya que alrededor del 50% del kilo de asado se pierde en hueso y grasa. Muchos consumidores prefieren cortes alternativos donde el 100% del peso es carne.
Carnes Alternativas: La demanda de carnes como el cerdo, pollo y pescado ha aumentado debido a sus precios más bajos comparados con la carne vacuna.
Tendencias y Precios
A pesar de la baja de precios, el consumo de asado sigue disminuyendo. El precio del kilo de asado está tocando mínimos de los últimos meses. Para mejorar esta situación, será clave mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y aumentar la exportación para liberar oferta del mercado interno, lo que podría ayudar a que los precios del asado crezcan y sean aceptados por los consumidores.
Conclusión
El precio del asado se mantendrá relativamente bajo en los próximos meses, pero mejorar el poder de compra y aumentar las exportaciones serán factores cruciales para que los valores de este corte crezcan y vuelvan a ser atractivos para los consumidores.
Fuente: Medios