Fin de la barrera sanitaria: alerta en el sector ganadero y dudas sobre el impacto en el asado
La eliminación de la barrera sanitaria tomó por sorpresa a los productores neuquinos, quienes alertan sobre posibles riesgos sanitarios y desconfían de un impacto positivo en los valores del asado.
La reciente eliminación de la barrera sanitaria para el ingreso de carne con hueso al sur del río Colorado sorprendió a los neuquinos, a pesar de los reiterados debates sobre el tema. Entre los más impactados estuvieron los productores de la Sociedad Rural de Neuquén, quienes expresaron su escepticismo ante la posibilidad de que la medida genere una reducción real en el precio del asado.
La normativa habilita el traslado de carne con y sin hueso desde zonas con vacunación contra la fiebre aftosa hacia regiones del sur del país, donde la aplicación de la vacuna no era una práctica vigente.
Los ganaderos neuquinos advirtieron que el estatus sanitario logrado a lo largo de décadas fue el resultado de un esfuerzo conjunto entre los gobiernos nacional y provincial. En este sentido, calificaron como "poco serio" exponer la producción local a un posible riesgo sanitario en pos de una reducción de costos que, según ellos, no está garantizada.
María Cecilia de Larminat, presidenta de la Sociedad Rural de Neuquén, aclaró que están sorprendidos por la medida. "Una de las primeras reacciones que tuvimos fue de sorpresa porque venimos reuniéndonos durante todo el año pasado con Nación y Provincia y en distintas mesas", dijo y agregó que este tipo de medidas intempestivas genera incertidumbre para el sector pecuario.
"Uno de los insumos más importante para la producción agropecuaria es la previsibilidad, nos afecta porque es una situación que cambia el escenario", dijo y agregó: "Tal vez tenga un beneficio potencial en los precios que lo pongo en duda porque la carne sin hueso sigue entrando libremente y nunca hubo precio más baratos".
Qué pasa con la aftosa en la región
De Larminat aclaró que hace años se registran brotes de aftosa en las zonas con vacunación, aunque recordó que en Europa sí aparecieron brotes en zonas libres de la enfermedad.
"Lo que deberíamos hacer es endurecer los requisitos hacia el norte, no flexibilizarlos hacia el sur", se lamentó. "Si querés limpiar una zona, tenés que ampliar la zona limpia, no poner en riesgo lo que ya limpiaste", añadió.
Tener este status sanitario permitía a los ganaderos de la Patagonia colocar su producción en otros países. "No sé si va a ser convalidado por los mercados internacionales, el cordero de Santa Cruz que es de exportación o la producción de Tierra del Fuego que sólo sale de Chile, hay que ver si lo van a dejar salir", cuestionó la presidenta de la Rural.
"Es una medida que genera incertidumbre en una etapa de la producción que es complicada. En la Patagonia tenemos las estaciones muy marcadas, no se pueden estirar los destetes. Acá se viene el invierno y tenés que descargar los campos con el destete y los animales improductivos", expresó.
Cuánto impacta la medida en los precios del asado
De Larminat aclaró que los productores pecuarios no son formadores de precios, ya que la carne que llega al consumidor pasa primero por una cadena en la que se añaden costos al producto final. Hoy, el kilo de asado ronda los 20 mil pesos en la región.
"Nosotros desde el campo no formamos los precios; vendemos en el momento que tenemos que vender al mejor postor", aclaró. Por eso, consideró que una medida sanitaria en sí misma no impacta de forma directa en el precio de la carne.
"El kilo en pie del animal gordo está en 3.900 pesos", dijo y agregó: "A eso se suma el flete, la faena, el frío, el desposte, la distribución, el carnicero, es toda una cadena que le agrega valor".
Aunque esta medida permitiría el ingreso de carne en media res y desde provincias donde hay una producción más masiva de carne, De Larminat recordó que el precio se forma en base a la ley de oferta y demanda en una región donde todos los valores son más altos que en el norte del país.
La productora aseguró que está permitido el ingreso de carne sin hueso, que no tiene precios más baratos en la zona, por lo que especuló que lo mismo podría ocurrir con la carne con hueso. "Cuando se corrió la barrera del río Negro al río Colorado, todos decíamos que iba a bajar el asado, y hoy estamos diciendo lo mismo", recordó.
"El productor, el matarife y el carnicero va a querer vender al precio más alto que pague el consumidor", dijo y agregó: "En un mes y medio, cuando se acomode todo, hay que ver si realmente bajó el precio".
Fuente: Medios.