Conocido "agresor" provocó destrozos en la guardia del Bouquet Roldán
Se trata de un hombre que vive en situación de calle en el Centro neuquino y genera malestar a los comerciantes con sus constantes agresiones. Los trabajadores del nosocomio temen por sus acciones violentas.
Un reconocido agresor del Centro neuquino, que continúa en situación de calle sin ningún tipo de contención, ya que se trata de un paciente psiquiátrico, atacó esta vez a los trabajadores de la guardia del Hospital Bouquet Roldán y generó varios destrozos en el lugar. El hombre posee más de 30 denuncias en su contra.
Tomás Tolosa, que es inimputable para la Justicia, comenzó a frecuentar la institución médica para pedir comida. Los empleados, al ver su necesidad, comenzaron a convidarle su propio alimento, pero esto fue escalando y sus exigencias cambiaron y se puso agresivo con ellos.
Aunque los empleados de la institución médica han intentado darles cobijo y les han permitido dormir en la sala de espera de la Guardia, para que no tenga que quedarse a la intemperie con las bajas temperaturas que azotan durante los meses de invierno, la situación se les ha salido de las manos.
"Llegó en los meses de invierno junto a otras personas buscando comida y donde poder dormir. Tenemos mucha gente en situación de calle que vienen y pasan la noche acá. A pesar de tener un lugar para descansar, se pelean entre ellos en el pasillo y al no ver una figura de autoridad, no solo se agreden, sino que también roban elementos del hospital", aseguró uno de los trabajadores del hospital.
De pedir comida a querer controlar a los trabajadores
El conocido agresor, aprovechándose de su contextura física, suele abrir las puertas a la fuerza e ingresar al sector de los empleados para exigirles, no solo parte de su comida, sino también medicamentos. "Nos amenaza que si no les damos comida va a pegarle a la gente que se encuentra en la Guardia esperando para ser atendida. Es una situación muy difícil", recalcó.
De este modo, la agresividad del hombre fue creciendo paulatinamente contra los propios trabajadores. "Me acuerdo perfectamente el primer incidente ocurrió el sábado 26 de agosto donde golpeó la pared y tuvo que ser contenido por la Policía", rememoró.
Este primer arranque violento contra los empleados se debió a que acudió a pedir drogas en lugar de alimentos. "El segundo fue el último jueves, cuando esta persona forzó la puerta del lugar donde los enfermeros reciben a las personas que vienen a la Guardia. Se violentó y comenzó a romper todo. Por suerte en ese momento no se encontraba nadie, ya que justo estaban en el cambio de turno", explicó.
A esto sumó: "Si no le damos comida, se anota para que enfermería lo controle. Y bueno, exige que se lo atiendan porque si no le va a hacer daño a la gente y hace referencia a que es inimputable".
Luego de exhaustivas guardias montadas por los mismos trabajadores han logrado que, en los últimos días, no ingrese al edificio, pero esto en lugar de desalentarlo lo vuelve más insistente y se queda merodeando en los alrededores del hospital. "Tenemos compañeras que les da miedo salir a la noche cuando finalizan su turno porque él suele quedarse en el estacionamiento y como es un espacio público no lo podemos sacar de ahí", explicó el trabajador.
¿Les han brindado una posible solución?
Los empleados que se ven afectado por el acoso y la violencia del hombre aseguran que es indispensable que haya un Policía en la Guardia, para poder garantizar tanto la seguridad de quienes se desempeñan allí como de las personas que se acercan a recibir atención. Esto se debe a que no saben a qué nivel de agresividad puede llegar este hombre.
"Nosotros llamamos a la comisaría, se lo llevan, lo demoran 12 horas, lo largan y después vuelve a seguir hostigando, porque él es consciente de que es inimputable y nadie se hace cargo y es un peligro para la sociedad, ya hemos visto las acciones violentas de las que es capaz", concluyó el trabajador.
Fuente: LMNeuquén