Cooperativa 127 hectáreas: la ilusión de la vivienda propia que terminó en estafa
Durante años, vecinos pagaron cuotas con la promesa de acceder a terrenos, pero hoy denuncian que fueron víctimas de un fraude millonario. Amenazas, presiones y una trama de irregularidades salieron a la luz, dejando en jaque a cientos de familias que temen perderlo todo.
Con la esperanza de obtener su casa propia, cientos de familias recurrieron a la Cooperativa 127 hectáreas, invirtiendo en su futuro. Sin embargo, su sueño se vio frustrado: terminaron siendo víctimas de estafa.
Entre los años 2021 y 2022, los ilusionados vecinos firmaron contratos de cesión onerosa para la adquisición de lotes en un predio de 60 hectáreas en La Meseta, un área de difícil acceso y sin posibilidad de contar con servicios básicos en el corto plazo.
Sergio, uno de los damnificados, cuenta en un dramático testimonio que les obligaban a pagar cada cuota en término, bajo la amenaza de perderlo todo. Pero, aunque cumplieron con su parte, jamás obtuvieron respuestas, fueron estafados.
"Él (Jorge Salas) tenía todo el derecho de exigirnos, pero nosotros no podíamos exigir nada. Íbamos a la cooperativa y nadie nos daba explicaciones", relató Sergio.
Jorge Salas, titular de la Cooperativa.
El terreno se encuentra en una zona de difícil acceso, en La Meseta, cerca de la Autovía Norte, sobre tierras fiscales ubicadas entre Plottier y Centenario. Está registrado en el Plano de la DGC 319/69 como parte del Lote 26 y figura en el Registro de la Propiedad Inmueble bajo la matrícula 28388-NC-09-046-8129-0000.
Una ilusión que terminó en estafa
La promesa era clara: la entrega de los terrenos antes del 15 de octubre de 2023 y el inicio del trámite de escrituración. Sin embargo, a meses de vencido el plazo, los damnificados solo han recibido excusas y silencio.
Mes tras mes, Sergio realizaba los pagos, mientras continuaba alquilando. Su esperanza de que le entregaran el lote se mantenía firme.
La primera denuncia de las víctimas.
"Hice un esfuerzo enorme para no atrasarme, pero nunca me dieron una respuesta clara. Nos aseguraban que todo avanzaba, pero era mentira. Nos dejaron sin nada", lamentó.
Ante la falta de respuestas, los afectados se organizaron para exigir explicaciones, pero solo encontraron evasivas. Aunque los amenazaban con perderlo todo si se atrasaban en los pagos, jamás recibían respuesta cuando consultaban por sus terrenos.
Un caso judicial de grandes dimensiones
El caso tomó relevancia pública tras la denuncia impulsada por el exdiputado Mariano Mansilla, quien inicialmente solicitó la inhibición de las cuentas de la cooperativa por un monto cercano a los 300 millones de pesos.
Ahora, se prepara para avanzar con una acción penal contra Jorge Salas, titular de la entidad.
Lo que se perfila como una mega causa judicial involucra la venta de terrenos y viviendas en distintas zonas, entre ellas La Meseta, Sirena Unificada, Centenario I y II, y China Muerta.
En Centenario, por ejemplo, los lotes fueron adjudicados entre 2013 y 2015, pero, al igual que en otras cooperativas que fracasaron, nunca se concretaron los servicios básicos, y hoy solo unas pocas viviendas se han construido.
"Esto no es un simple error administrativo, es una estafa a gran escala. Gente de trabajo perdió sus ahorros confiando en un engaño", advirtió Mansilla.
A pesar de la desilusión y la bronca, las víctimas se niegan a rendirse y lucharán hasta recuperar al menos parte del dinero invertido. Se mantienen firmes defendiendo sus derechos, porque pagaron y cumplieron, pero solo recibieron promesas vacías.
Promesas vacías e ilusiones rotas
A los vecinos se les prometió que en un año tendrían sus viviendas construidas. Al principio, pagaban las cuotas a través del Banco Credicoop, pero luego fueron obligados a cambiar de método de pago. Posteriormente, abonaban a través de Pago Fácil, con boletas que les llegaban al mail.
Algunos estuvieron pagando durante 15 años sin recibir ni siquiera un terreno, no solo en La Meseta, sino también en China Muerta y Centenario.
Ante la falta de respuestas, las víctimas decidieron investigar por su cuenta el estado de los trámites en el Instituto Municipal de Urbanismo y Hábitat (IMUH). La respuesta fue desconcertante: el loteo no está reconocido y no existen gestiones ni solicitudes para su regularización.
A lo largo de los años, la situación dejó casos insólitos. Algunos vecinos llegaron a pagar por paradores e incluso por cordones cuneta. Para cumplir con los pagos, muchas familias vendieron su auto o solicitaron créditos con la esperanza de recibir su vivienda. Sin embargo, esa ilusión nunca se concretó.
Actualmente, la investigación avanza en el fuero civil, aunque aún no cuenta con un juez a cargo. Mientras tanto, los estafados continúan exigiendo respuestas y luchando por recuperar lo que les pertenece.
Ahora solo queda esperar que la Justicia actúe. Solo el tiempo dirá si los vecinos verán su reclamo resuelto o si, como tantos otros, quedará en el olvido.
Fuente: Medios