Roca revela restos de los dinosaurios más imponentes en Paso Córdoba
Los gigantes de la tierra dejaron sus huellas en la Patagonia. Descubrí por qué.
Algunas de las más recientes evidencias de titanosaurios, esos dinosaurios de cuatro patas y cuellos extensos, se han encontrado en General Roca, en el Área Natural Protegida Paso Córdoba.
Esta semana, todas las miradas se centraron en la zona, ya que el 16 fue el Día Internacional del Fósil. Este lugar adquiere una relevancia especial, ya que alberga hallazgos de dinosaurios que incluyen no solo restos óseos, sino también icnológicos, compuestos por las huellas y rastros que dejaron a su paso.
"Esa riqueza es muy interesante y llamativa. Los saurópodos (entre los que se engloban los titanosaurios) eran grandes, de cuello y cola largos, aunque con cabezas pequeñas en relación al tamaño de su cuerpo. Eran herbívoros y cuadrúpedos. Los fósiles de distintos tipos que encontramos en esa parte de Roca evidencian que ellos habitaron distintos ecosistemas, y quedaron huellas en cada uno de los estratos que datan de esos cambios", contó la paleontóloga Geraldine Fischer, becaria doctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) en el Instituto de Investigación en Paleobiología y Geología.
"Ocurre que en la última edad del periodo Cretácico (que comenzó hace 145 millones de años y terminó hace 66 millones) hubo un ingreso de agua que llegó hasta la barda norte, por eso en el lugar encontramos fósiles marinos. Los saurópodos migraban costeando las dunas, en busca de recursos naturales. Y dejaron todo tipo de indicios de su presencia", explicó la científica.
La experta también dio detalles de por qué las áreas patagónicas tienen tanta riqueza en materia de fósiles. Así, Fischer comentó que para que se formen los fósiles se tienen que dar condiciones muy específicas: estos rastros se conservan en rocas sedimentarias. Y lo que tiene La Patagonia es eso, una gran extensión de terreno y muchísima acumulación de capas sedimentarias.
"Cuando hablamos de fósil hablamos de cualquier evidencia, ya sea directa o indirecta, de la actividad de un ser vivo en el pasado geológico. Y, para que algo sea identificado como tal, su origen debe datar de unos 5.000 a 10.000 años. Aunque este rango sigue siendo objeto de debate. Estos indicios deben ser restos o remanentes de animales, vegetales o microorganismos, o reflejar alguna actividad relacionada con su vida. Es decir, huellas, huevos, nidos, marcas de dientes o arañazos que dejaba al alimentarse, es algo muy amplio", aclaró.
Cabe destacar que la Asociación Paleontológica Internacional estableció el 16 de octubre como el Día Internacional del Fósil, con el fin de destacar su contribución científica y educativa, que nos ayuda a entender el desarrollo de la vida en nuestro planeta.
Fuente: medios