La medida tomada por el Sindicato que nuclea a los trabajadores de petróleo y gas, responde principalmente al rechazo de la reforma impositiva impulsada por el gobierno de Javier Milei.
El objetivo del paro es reclamar un "aumento salarial por encima de la inflación, la inmediata reincorporación de despedidos sin causa y el pase a planta permanente.
La medida de fuerza se centra en la falta de entrega de mercadería a comedores y merenderos, a lo que se le suma un recorte del 10%. Sin respuesta claras, endurecerán las medidas de fuerza la semana entrante.