Fingía ser médica y entregaba certificados con una matrícula falsa
Se trata de una asistente dental quién quedó bajo investigación policial por dar certificados médicos con una matrícula falsa y con sellos de otros profesionales.
Una mujer, asistente dental en un centro de salud del Oeste neuquino, quedó bajo investigación por emitir certificados médicos con una matrícula falsa y con sellos de otros profesionales. El accionar de la médica falsa salió a la luz con una secuencia inesperada.
El oficial principal Gerardo Oviedo informó a que todo inició a fines de enero pasado, cuando un médico de Neuquén se acercó al Departamento Delitos Económicos a formalizar una denuncia contra una mujer que al parecer fingía ser médica y bajo este engaño emitía certificados a diversas personas.
Oviedo indicó que el denunciante es concurrente de uno de los varios clubes que se ubican sobre la calle Río Negro, a la vera del Río Limay, y fue en uno de sus días de esparcimiento que un primer atisbo del engaño llegó a sus oídos.
Según relató, ese día conversó con una de las referentes del club en cuestión quien, en confianza, le hizo saber que tenía problemas para cobrarle la cuota mensual a otra socia del predio, "colega tuya", le indicó al hombre. La referente manifestó que le parecía extraño que la médica no pudiera pagar teniendo en cuenta que sabía que trabajaba y la cuota era de una cifra accesible, pero por algún motivo, la socia sospechosa parecía evadir el pago.
"A todo esto, el denunciante le dice 'Bueno, contame quién es', pero él no la reconoció como médica. Sabía que era alguien que trabajaba en el sistema de Salud, pero no que era médica. Así que le dice a la referente 'Pasame los datos y yo corroboro'", confió Oviedo.
Justamente, la referente del club tenía un certificado que la supuesta médica le había emitido, con su sello incluido, de manera que el médico denunciante comenzó a hacer las rondas para verificar si se trataba de una colega. Consultó en organismos oficiales de Salud y hasta chequeó el número de "matrícula especial" que formaba parte del sello, momento en que surgió la incongruencia mayor.
Médica trucha
Según surge de la investigación, la mujer que firmaba el certificado no solo no era médica, sino que además utilizaba un número de matrícula imposible. "El último número de matrícula especial que se ha emitido no llega a más de 5500 y el de ella era muy superior", contó Oviedo. Esto significa que la mujer utilizaba un número de matrícula que ni siquiera existe aún.
Con todos estos elementos, el médico se acercó a denunciar la estafa que estaba cometiendo la mujer y dejó el resto de la investigación en manos de Delitos Económicos. Los efectivos lograron corroborar la maniobra y establecieron que la mujer sospechosa era también concurrente del club y trabaja como asistente dental en el Centro de Salud de barrio El Progreso.
Luego, se estableció la ubicación de su domicilio, en calle Malargüe, y se pidió a la Justicia una orden de allanamiento, diligencia que se concretó el martes de esta semana.
La médica trucha trabajaba en el centro de salud de barrio Progreso
Allí, se dio con varias piezas de evidencia, entre lo cual se destacan más de 130 recetarios en blanco, de los cuales poco más de 50 de ellos tiene el membrete del centro de salud donde se desempeña la mujer. Curiosamente, un recetario con este mismo membrete fue el utilizado para emitir el certificado a la referente del club.
Además, se encontraron recetarios con el sello de al menos un profesional distinto, por lo que también se investiga que haya utilizado esta modalidad para emitirlos.
La mujer fue ubicada en la vivienda al momento del allanamiento, por lo que fue demorada y trasladada a la unidad, donde se la notificó de la investigación en su contra. Luego, por orden de la fiscalía homónima, se le otorgó la libertad supeditada.
Oviedo indicó que se trata de una mujer de alrededor de 40 años.
Fuente LMNeuquén