Juicio por Agustina: "El hombre de negro que aparece en las cámaras era Parra"

El juicio por el femicidio de Agustina Fernández sigue su curso, y la quinta jornada arrancó con la declaración de uno de los peritos que analizó más de 500 horas de video y que sostiene que el acusado es el hombre de negro y encapuchado que capta una sola cámara de seguridad, y la única persona que pudo haber ingresado al complejo.

En las cuatro audiencias anteriores del juicio los peritos plantearon que hubo 33 minutos en los que el recorrido de Parra no se ajustó al preciso y milimétrico relato que hizo en cada una de sus declaraciones. Pero en ese rango de tiempo los investigadores pudieron identificar su auto por calle Venezuela, en cercanía del hospital a unos 600 metros del complejo. Y que luego que desaparece de las cámaras del Hyundai, aparece un hombre encapuchado que camina hacía los departamentos y luego se lo ve volver hacia el vehículo.

El perito Nicolás Venegas confirmó que visualizó unas 500 horas de videos correspondientes a cámaras de seguridad que solicitó a los vecinos de la zona. Logró ubicar el Hyundai de Parra en las inmediaciones del complejo por un detalle muy particular, es que una de las ópticas delanteras "la derecha apunta hacia abajo".

Para los investigadores el ataque a la joven estudiante de medicina sucedió entre las 19:32 y las 19:39 del sábado 2 de julio de 2022, en ese lapso de tiempo el auto de Parra no aparece en ninguna cámara y vuelve a aparecer en calle Venezuela y Río Negro minutos después.

Dentro de ese período de tiempo, otra cámara, más cercana al complejo capturó el paso de un hombre encapuchado. "La persona de negro es la única que pudo haber entrado al complejo", aseguró Venegas, quien explicó que "no se encuentra en las cámaras, sólo en una que está en la esquina de los departamentos, por la que pasa el encapuchado ocultando su cara".

El perito fue consultado si pasaron más personas por ese lugar, y aseguró que sólo una persona más, pero que fue descartado como sospechoso porque se alejaba de la escena según el recorrido que trazaron con otras grabaciones.

En esa misma cámara, minutos antes, se la ve pasar a Agustina, que fue a comprar a una verdulería cercana y regresó al complejo antes del horario señalado por los investigadores como en el que ocurrió el salvaje ataque.

El defensor de Parra apuntó contra las afirmaciones del testigo, y le consultó precisamente cómo sabe que el hombre de la imagen entró al complejo. El testigo Venegas aclaró: "No se lo ve entrar". El abogado Juan Manuel Coto también consultó sobre la relación entre el hombre de negro y el auto que dicen que es de Parra, y el perito también aseguró que "no se lo ve subirse a un auto o bajar", y ratificó que "tampoco se le vio la cara".

El abogado hizo referencia a que en las grabaciones de la heladería Grido, donde fue a comprar, se lo ve a Parra con otro tipo de ropa. Además, cuestionó que la única forma de identificar el Hyundai sea por una óptica que apunta hacia abajo porque no se le ve la patente en ninguna imagen.

Qué pasó durante el 4° día del juicio

 Durante este jueves, surgieron detalles reveladores sobre el comportamiento de Pablo Parra y los eventos ocurridos en el complejo. Más allá de la insistencia de Parra en instalar la versión del robo, dos vecinos declararon haber escuchado un grito desgarrador seguido de un golpe que dejó el lugar en silencio.

El trágico suceso tuvo lugar el 2 de julio de 2022 en el departamento de planta baja del complejo ubicado en Confluencia al 1300, en el barrio Sillón Encantado de Cipolletti. En ese momento, entre las 19:16 y 19:49, los investigadores trazaron una línea de tiempo que sitúa el vehículo de Parra en la calle Venezuela, perdiéndose en Río Neuquén. Treinta y tres minutos después, el Hyundai gris reapareció en Venezuela y Río Negro, a 100 metros de distancia. Se cree que Parra estacionó el auto, regresó caminando al complejo, cometió el ataque y luego volvió al vehículo.

Uno de los vecinos, Ricardo Espinoza, quien conocía a Parra desde la escuela, relató haber escuchado un grito de auxilio seguido de un fuerte golpe, momentos antes de salir de su departamento para hacer compras. A pesar de la claridad de los sonidos, no investigó más por temor. Por otro lado, Daiana Morales, que actualmente reside en España, no escuchó el "pará, pará", pero sí un contundente "Hijo de puta".

En cuanto a la relación entre Parra y Agustina, los testimonios variaron. Algunos vecinos pensaban que eran pareja, mientras que otros, como Claudio Oliva, notaban cierta tensión y sospechaban que Agustina estaba engañando a Parra. Oliva describió momentos en los que los veía juntos, llevándole "gaseosas" o "pochoclos" al departamento del acusado.

La jornada también incluyó el testimonio de un perito que analizó las prendas de Agustina y comparó las fibras encontradas con un trozo de tela azul hallado en el alambre de la concertina del paredón. Aunque se encontraron similitudes entre las fibras de la ropa y el trozo de tela, no se pudo determinar con certeza que fueran del mismo material, lo que sugiere la necesidad de un análisis más detallado.

El juicio continúa revelando detalles sobre este trágico suceso, arrojando luz sobre lo sucedido aquel fatídico día y buscando justicia para Agustina Fernández.

Fuente: Medios