Claves del nuevo escenario para trabajadores autónomos y pymes
La reciente reglamentación de la Ley de Bases trae cambios fundamentales para trabajadores autónomos y pequeñas empresas. Desde la regularización de relaciones laborales hasta nuevas opciones de cese laboral, este decreto busca formalizar y flexibilizar el mercado laboral.
La reforma laboral de 2024, oficializada a través del Decreto N° 847/24, introduce una serie de cambios fundamentales que impactarán directamente en el mercado laboral argentino, especialmente en el ámbito de los trabajadores autónomos y las pequeñas y medianas empresas (pymes).
Este nuevo marco busca formalizar las relaciones laborales no registradas y proporcionar mayor flexibilidad en la contratación y desvinculación de empleados, con el objetivo de ofrecer certidumbre tanto para empleadores como para trabajadores.
Regularización de relaciones laborales y condonación de deuda
Uno de los ejes principales del decreto es la regularización de relaciones laborales deficientemente registradas o completamente no registradas. Las empresas y entidades que adhieran a este proceso podrán acceder a una condonación de deuda que puede llegar hasta el 90% en el caso de micro y pequeñas empresas, siempre que cuenten con el certificado Mipyme. Este porcentaje disminuye al 80% para medianas empresas y al 70% para otros empleadores, destacando así el esfuerzo por aliviar la carga financiera de las organizaciones más pequeñas.
Además, para los empleadores con deudas vinculadas a aportes y contribuciones en materia de salud y riesgos laborales, se habilita una condonación total (100%), lo que representa un incentivo para que más empleadores regularicen su situación. Este proceso incluye la posibilidad de realizar pagos al contado con beneficios adicionales o acogerse a planes de pago en cuotas.
Modificaciones en la Ley Nacional de Empleo y Ley de Contrato de Trabajo
El Decreto N° 847/24 también trae cambios relevantes en dos pilares del marco laboral argentino: la Ley Nacional de Empleo y la Ley de Contrato de Trabajo. A partir de ahora, las relaciones laborales se considerarán registradas tan pronto como el trabajador sea inscripto ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), sin importar si el registro es hecho por el empleador directo o por una empresa usuaria. Este cambio apunta a garantizar una mayor formalización desde el inicio de la relación laboral.
Por otro lado, se limitan las presunciones de dependencia laboral en el caso de trabajadores autónomos que presten servicios o realicen obras para una misma empresa contratante, incluso si emiten varias facturas al mismo cliente. Esta medida está diseñada para ofrecer mayor claridad en la contratación de autónomos, protegiendo tanto a los empleadores como a los trabajadores independientes de posibles conflictos relacionados con la dependencia laboral.
Nuevas reglas para el período de prueba y retenciones
Otro de los cambios introducidos por la reforma afecta al período de prueba en las nuevas contrataciones, que solo se aplicará a las relaciones laborales iniciadas después de la entrada en vigor de la Ley de Bases. Esto ofrece una mayor estabilidad a los trabajadores una vez que superen dicho período, contribuyendo a reducir la precariedad laboral en las primeras etapas de la relación de empleo.
Asimismo, la reforma establece un sistema de retenciones para empresas contratistas que adeuden remuneraciones o indemnizaciones. Estas retenciones no podrán superar el monto adeudado por cotizaciones a la seguridad social, lo que busca proteger a los trabajadores y garantizar que reciban sus pagos en tiempo y forma.
Fondo de Cese Laboral: una alternativa a la indemnización tradicional
Uno de los cambios más innovadores que trae esta reforma es la creación del Fondo de Cese Laboral, una alternativa al sistema tradicional de indemnización por antigüedad. Este fondo permitirá tres opciones: el sistema de cancelación individual, el Fondo de Cese (individual o colectivo) y el Seguro de Cese (individual o colectivo). Estos mecanismos serán negociados dentro de los convenios colectivos de trabajo, lo que proporciona un enfoque más flexible para la terminación de la relación laboral y, al mismo tiempo, otorga mayor previsibilidad y equidad en los pagos al trabajador en caso de despido.
Este nuevo sistema tiene el objetivo de eliminar arbitrariedades en el cálculo y pago de indemnizaciones, garantizando un trato justo para los trabajadores más vulnerables. Además, ofrece una herramienta eficaz para que las empresas gestionen sus compromisos laborales sin los costos imprevistos asociados a la liquidación tradicional.
Impacto en los trabajadores independientes
La reforma también introduce novedades importantes para los trabajadores independientes, quienes podrán contratar hasta tres colaboradores bajo un régimen especial que los obliga a estar registrados en el sistema general de impuestos y seguridad social. Esta medida busca formalizar aún más las actividades laborales autónomas, promoviendo un mercado más ordenado y regularizado.
Además, los colaboradores independientes tendrán la posibilidad de mantener contratos simultáneos con otros contratantes, lo que fomenta la flexibilidad en el mercado laboral y permite a los trabajadores independientes diversificar sus ingresos sin verse limitados por la rigidez de una única relación laboral. Este aspecto refuerza la libertad y autonomía de los trabajadores en la economía moderna, respondiendo a la creciente demanda de trabajos temporales o a corto plazo.
Fuente: Medios