Zulma Reina y los nuevos recortes en la Legislatura de Neuquén

Tras la destitución de Gloria Ruiz como vicegobernadora de Neuquén bajo el argumento de "inhabilidad moral", un hecho que marcó un precedente político en la provincia, la presidenta de la Legislatura a cargo, Zulma Reina, implementó una serie de ajustes profundos. 

Su gestión, definida por una "motosierra administrativa", ha llevado a una significativa reducción en la estructura de personal y beneficios en el organismo.

Recortes en contratos y beneficios

Hasta el momento, Zulma Reina dio de baja 65 contratos, de los cuales 40 correspondían a cargos políticos y 25 a contratos temporarios que no fueron renovados. Estos recortes implicarán un ahorro anual estimado en 1.300 millones de pesos para el presupuesto legislativo de 2025.

Además, la nueva gestión suspendió el beneficio destinado a cubrir parte de los costos de las colonias de vacaciones para los hijos de los empleados legislativos, una prestación que se mantenía vigente desde las gestiones de Rolando Figueroa y Ana Pechén.

Según la Asociación Neuquina de Empleados Legislativos (ANEL), este beneficio no se otorgó el año pasado debido a restricciones presupuestarias y, por ahora, no hay definición sobre su continuidad en 2025. En tanto, el gremio está asumiendo parcialmente el costo de las colonias para garantizar el acceso de los hijos de sus afiliados durante enero y febrero.

Desvinculaciones resonantes

Entre las bajas más destacadas se encuentran las del asesor Néstor Gelos, acusado de no cumplir funciones; Gustavo Chittadino, prosecretario legislativo; y otros funcionarios vinculados a áreas administrativas y políticas, como Vicente Fabián Molina, Cristian Antonio Banegas y Marcos Horacio López.

La política de ajustes de Reina está alineada con los objetivos del gobernador Rolando Figueroa, quien busca optimizar los recursos financieros y fortalecer la imagen institucional tras los cuestionamientos éticos durante la gestión de Gloria Ruiz.

En este contexto, la mayoría de los puestos vacantes se han cubierto con personal de planta permanente, priorizando la estructura existente. Por ejemplo, Mariana Valdebenito asumió como secretaria de Cámara y Claudio Cotro como prosecretario legislativo. Solo en casos específicos, como el del prosecretario administrativo, Darío Brugues, se optó por un nombramiento político.

La reducción de la planta política y la optimización de recursos financieros son presentadas como medidas necesarias para sanear las cuentas públicas. Sin embargo, estas decisiones también generan incertidumbre respecto a la continuidad de beneficios históricos, como las colonias de vacaciones, y su impacto en el clima laboral interno.

La transición iniciada tras la salida de Gloria Ruiz promete continuar con nuevos ajustes en febrero, en un proceso que busca equilibrar las finanzas públicas sin desatender las necesidades del personal legislativo.

Fuente: Medios