Acuchilló a su expareja en un hotel céntrico, pagó otra noche y se escapó
La Justicia actuó de oficio, y con la ayuda de los empleados del hotel, detuvieron al agresor. Le dieron prisión preventiva.
Un terrible escenario quedó al descubierto en un hotel ubicado en pleno centro de Neuquén, donde un hombre atacó a su expareja. En el lugar, se registraron manchas de sangre en la cama, en una frazada, en el baño y en una de las ventanas de la habitación.
La mucama del hotel accionó rápidamente y alertó a la encargada, quién evidenció una escena muy violenta en lo que fue un intento de femicidio.
Si bien salió a la luz en las últimas horas, el horror que padeció una joven neuquina, viene de larga data, pero este hecho en sí sucedió el pasado domingo 5 de marzo.
La encargada, asustada y tratando de comprender que había sucedido, radicó la correspondiente denuncia penal en Comisaría Primera. La asistente letrada de la fiscalía Lucrecia Sola, tomó el caso y trabajó rápidamente para esclarecer los hechos. Y afortunadamente, no tenemos que hablar, nuevamente de una joven neuquina muerta en manos de su ex pareja.
La víctima estaba inmersa es una situación totalmente vulnerable de violencia física y psicológica. Debido a eso, en un primer momento, no pudo denunciarlo, hasta que la policía al actuar por oficio, descubrió la terrible realidad que atravesaba.
Gracias a la falta de pago de un huésped de dicho hotel, ubicado en calle Rivadavia al 300, una de las trabajadoras del sector de limpieza ingresó al cuarto, y no podía creer lo que estaba viendo: "Observó muchas manchas de sangre por varios lados; en la cama, en una frazada, en el baño y una ventana", sostuvo Lucrecia Sola.
Personal de Criminalística y de Seguridad Personal, arribó ese mismo día y peritó la habitación además de secuestrar varios elementos como los registros de la cámara de ingreso del hotel donde se ve al violento de apellido López, junto a la víctima ingresar y luego salir, en distintos momentos, por separado.
Además, entrevistaron al personal del hotel, particularmente a los conserjes y las mucamas.
"Se alojaron en esa habitación y el hombre pidió con énfasis que no realizaran el servicio de cuarto el domingo, minutos después del intento de femicidio", declaró ante la policía una de las mucamas.
Luego de que los efectivos localizaran a la joven víctima, ella se quebró emocionalmente y pudo detallar lo que sucedió. El sábado 4 de marzo, a las 22 horas, ambos se habían alojado allí. Ellos habían mantenido una relación de pareja por casi un año y unos 10 meses de convivencia. Ese día se habían juntado "para poder tener una buena relación, y llevarse finalmente bien", sin embargo el volvió a ejercer violencia de género hacia ella.
La asistente letrada detalló en la audiencia realizada el último viernes 10 de marzo que la teoría del caso que persigue la fiscalía sobre lo acontecido esa mañana, alrededor de las 8, es que el hombre "intentó matar a quien había sido su pareja, ejerciendo violencia de género".
"Ese día, cuando ella se despertó en la habitación, el imputado ya tenía una navaja en su poder. Le pidió perdón por lo que iba a hacer, le dijo que la amaba y que si no era de él no iba a ser de nadie, para a continuación agredirla con la navaja en la zona del cuello con la clara intención de quitarle la vida, a la vez que le tapaba la boca para que no gritara", describió la asistente letrada Sola y agregó que "la víctima logró defenderse, resistirse y hacer que se calmara diciéndole que podían volver a estar juntos. Fue así como cesó esta agresión".
"Luego de eso, la víctima desesperada le pidió que llamara a una ambulancia, el corte que tenía en el cuello era muy grande y se estaba descompensando. López le decía que lo iba a hacer, sin embargo tenía que ir a recepción, porque había roto ambos celulares. Salió de la habitación, pagó una noche más y salió del hotel. Ella, como pudo, se tapó el cuello con un pañuelo y se fue".
El violento fue acusado y quedó con prisión preventiva. Por su parte, la fiscalía solicitó para el acusado la medida cautelar más gravosa, es decir, la prisión preventiva por el plazo de seis meses. Para ello argumentó que se dan el riesgo de fuga, el de entorpecimiento y hacia la integridad de la víctima.
Fuente: Mejor Informado