El rumbo neuquinizante: conectar vaca muerta con la neuquinidad
El frente neuquinizate avanza en la ecuación económica y política. Las posibilidades de exportación de gas a Brasil. El presupuesto 2025, el acuerdo por la neuquinidad y la etapa de redistribución.
Esta semana el gobernador Rolando Figueroa asistió junto a su ministro de energía a la OAG Brasil. La cita fue en Río de Janeiro. El mandatario neuquino milita las posibilidades de Vaca Muerta en cada una de las selectas tribunas que los hidrocarburos ofrecen. Su mensaje recorre la ecuación buscada: extraer el petróleo y el gas cuanto antes para reinvertir regalías en el Neuquén Pos-Vaca Muerta. Reducir costos a partir de la innovación, redistribuir en mejoras tangibles para la comunidad local y "responsabilidad generacional" formaron parte, como siempre, de la prosa del líder neuquinizante.
El viaje a Brasil fue un poco más allá de los encuentros protocolares y las formalidades. Incluyó una próspera reunión con directivos de la gigante estatal Petrobras. La empresa brasilera mostró interés en diversificar sus fuentes de suministro de gas natural, y Vaca Muerta representa una oportunidad para ello. Importar gas de Vaca Muerta podría ser una estrategia de Petrobras para asegurarse un suministro estable, especialmente en momentos en que busca optimizar costos y reforzar el abastecimiento energético. Para que la posibilidad sea tangible hay que revertir el gasoducto norte. El ministro de energía de la provincia, Gustavo Medele, se encargó de aclarar en medios locales que "la parte técnica no debería tener mayores contratiempos... ... se viene la etapa de acuerdos" con las partes interesadas desde Brasil, hasta los dueños de los distintos tramos del gasoducto.
La prosperidad económica de Vaca Muerta desborda evidencia y comienza a reflejarse en la recaudación provincial. Tras la etapa de "ordenamiento" del sector público y los récords de producción en la cuenca, el desafío político pasa por "demostrar que la industria y los beneficios para los neuquinos están relacionados". De allí que el jefe de gabinete, Juan Luis Pepé "Ousset" haya dedicado la semana a atender la otra orilla del asunto: la construcción con los intendentes del presupuesto 2025.
Con eje en el esquema de regionalización trazado por los neuquinizantes, el titular de la jefatura de gabinete afina la lapicera y recorre la provincia. Se trata de construir un presupuesto en base a los acuerdos regionales que alcancen los jefes comunales sobre las prioridades de cada zona. Esta semana fue el turno de la región centro-oeste. "Iniciando una nueva etapa en la provincia, trazando la etapa de la redistribución y definiendo las obras más importantes para cada una de las regiones" resumió Ousset tras el encuentro. Una hoja de ruta que pretende conectar el potencial económico con la construcción de legitimidad política y sustentabilidad social.
El intendente zapalino, Carlos Koopmann manifestó su conformidad con el encuentro regional: "celebro que nos hayan hecho parte y nos incluyan a los municipios de la zona centro, vamos a recibir varias obras en educación, salud y seguridad" sentenció el intendente del Movimiento Popular Neuquino, otrora adversario político de la coalición que desbancó al MPN.
Demostrar que las bonanzas de la industria hidrocarburífera se traducen posibilidades para los locales parece ser el desafío central del cambio que propone el oficialismo. De allí la distribución de tareas entre sus principales dirigentes, de allí los extremos de la agenda: con naturalidad, el gobernador asiste a los meetings de Houston o Brasil y recorre el interior profundo anunciando obras postergadas. Añelo, Guañacos y Los Miches se suman a los municipios que tendrán conexión a la red de gas. También Barrancas y Buta Ranquil salieron beneficias. Apenas ejemplos de un gobierno que necesita convencer a los neuquinos de una obviedad no tan obvia en los últimos años: vaca muerta es de los neuquinos.
El telón de fondo lo aportó esta semana el complejo escenario nacional. Según el INDEC, el 52,9 por ciento de los argentinos y más del 60 por ciento de los niños son pobres. Si bien Neuquén obtuvo datos menos desalentadores (40,4 por ciento) los fracasos de cuatro décadas demostraron que con la democracia no necesariamente "se come, se cura y se educa" hace falta algo más.
La provincia de Neuquén se transforma y no "de apoco", en la zona más pujante del país y asume los desafíos del caso. Al déficit crónico en infraestructura se suman la migración interna en crecimiento y la necesidad de reconvertir su perfil productivo en las próximas tres décadas. "Salud, educación, seguridad e infraestructura". Es la nómina de prioridades que repiten los principales expositores del rumbo neuquinizante. Si la celeridad acompaña, son buenos puntos de partida.
