La manzana Kissabel, reconocida por su pulpa roja y jugo de color rosa, comienza su segundo año de validación comercial en Argentina. La producción se realiza en seis hectáreas distribuidas entre Mainqué y General Enrique Godoy, bajo la gestión del vivero Los Álamos de Rosauer, mientras que el Grupo Prima, propietario de la licencia exclusiva, prepara la nueva etapa de producción tras la experiencia inicial en el mercado local.

El Grupo Prima, integrado por Patagonian Fruits y Moño Azul, posee la licencia exclusiva de la Kissabel en Argentina y viene de realizar su primera experiencia productiva el año pasado, con pruebas comerciales orientadas al mercado local y proyección de exportación. Adrián Gutiérrez, gerente de Producción Primaria Propia, explicó: “Este año vamos a tener nuestra segunda producción comercial, validando no solo el color de la pulpa sino también la conservación del fruto”.

Según la empresa, el sabor de la manzana Kissabel combina acidez y dulzura, con una textura crujiente y jugosa, mientras que su jugo rosa la hace única en el país. Juan Martín Rosauer, gerente administrativo y socio de Los Álamos de Rosauer, destacó que la manzana roja sigue siendo emblemática en Argentina y el Cono Sur: “Al mercado argentino y brasileño les gusta, mientras que Europa se inclina hacia las variedades bicolores que priorizan sabor, crocancia y aroma. Las rojas se conservan bien, pero quedaron rezagadas a nivel internacional”.
El Grupo Prima y Los Álamos de Rosauer proyectan que, una vez completada la validación comercial y cerrados los circuitos de venta, la producción de la manzana Kissabel podrá escalar, consolidando esta fruta como un producto novedoso y atractivo para los consumidores locales y extranjeros.
Fuente: Medios