Un accidente de tránsito ocurrido este jueves por la noche en la zona norte de Neuquén derivó en un hecho de violencia dentro del hospital Castro Rendón, donde la mujer involucrada y su madre agredieron al personal médico y de enfermería. Según denunciaron trabajadores de salud, la situación requirió la intervención de una enfermera ante la ausencia de acción policial.
El accidente se registró cerca de las 22:30, en el tramo final de la Avenida Alfonsín, cuando un Ford blanco, con un hombre y una mujer a bordo, circulaba hacia la rotonda para incorporarse a la Avenida del Trabajador. Por circunstancias que aún se investigan, el conductor perdió el control y el vehículo terminó impactando contra un poste de luz. La velocidad habría sido un factor determinante en la gravedad del choque.
Según un vecino, el auto quedó completamente destruido en su parte frontal, con el capot hundido y el parabrisas estallado. Restos del impacto, como vidrios y plásticos, quedaron esparcidos sobre el asfalto, aunque afortunadamente no se registraba mayor tránsito en el momento.

Agresión en el hospital
La mujer fue trasladada de urgencia por una ambulancia del SIEN al hospital Castro Rendón, aparentemente tras una convulsión derivada del accidente. Según Alfredo Fraccaroli, jefe de enfermería de la guardia, “una paciente ingresó en el contexto de accidente de tránsito, cuando llegó no estaba con una convulsión, la vieron los médicos, la vio enfermería, se la empezó a medicar, se le colocó suero”.
Sin embargo, en pocos minutos “la paciente se excitó y comenzó a insultar y agredir al personal”. Frente a la situación, donde se quitó el suero e intentó golpear a médicos y enfermeros, los profesionales hicieron pasar a un familiar para calmarla, pero según Fraccaroli, “fue peor, porque la madre se sumó a la excitación, la médica que estaba atendiendo decidió correrse y que venga otro médico, a la paciente la convencieron para que se siga atendiendo porque era necesario”.
El jefe de enfermería agregó que al llamar a la policía, los efectivos presentes no intervinieron: “un policía masculino al ser una paciente femenina decidió no actuar porque manifiestan que ellos al ser mujer no la pueden tocar y sí o sí la tiene que abordar una consigna policial femenina”. Finalmente, fue una enfermera de servicio la que logró reducir a la paciente para continuar con la atención.
Fraccaroli sostuvo que este episodio forma parte de una serie de situaciones de violencia contra el personal de salud en el último año, y señaló que la falta de recursos humanos y la saturación del personal agravan estos casos. “Somos sometidos a situaciones de violencia desde hace más de un año”, explicó, recordando incidentes previos con pacientes agresivos, incluyendo uno reciente vinculado al consumo problemático de alcohol y otro hace un año dentro de un consultorio.
Acciones posteriores
Tras el episodio, el servicio de guardia permaneció interrumpido varias horas. Desde el hospital informaron que mantuvieron una reunión con la Comisaría Primera para evaluar lo ocurrido y coordinar medidas que garanticen la seguridad del personal.
Respecto al accidente, se realizaron tests de alcoholemia: el hombre que iba a bordo dio resultado negativo. Las autoridades continúan investigando las circunstancias que llevaron a la pérdida de control del vehículo y quién conducía en ese momento.
Fuente: Medios.







