La investigación contra Lidia Esther Lobo, conocida como la “viuda negra” y cuyo apodo viral de “Araña Culona” recorrió las redes con casi cinco millones de reproducciones, reveló una serie de robos resonantes cometidos en distintos puntos de Buenos Aires.
Su modus operandi era siempre similar: ingresaba a los departamentos de sus víctimas, las adormecía y luego se llevaba todo lo que encontraba, incluso realizaba transferencias electrónicas antes de escapar.
Tras semanas de seguimiento, Lobo fue detenida el 2 de diciembre en Choele Choel, luego de que la Policía Federal emitiera un pedido formal de captura. Según pudo reconstruirse, apresarla no fue fácil: la búsqueda se extendió por más de un mes y medio y requirió tareas de inteligencia que incluyeron operativos fallidos y oportunidades perdidas.
El primer intento para detenerla ocurrió el 26 de octubre, día en que debía presentarse a votar, pero no asistió. Luego, las autoridades intentaron hacerla concurrir a la Comisaría 8° con una excusa, pero aunque se presentó, la orden de detención aún no había llegado. El oficio ingresó apenas minutos después de que la mujer se retirara, por lo que los agentes tuvieron que salir a buscarla y detenerla en la vía pública.
El caso que encendió la alarma
La denuncia inicial se registró el 2 de abril. Un hombre se presentó en una comisaría porteña y aseguró que una mujer con la que mantenía encuentros ocasionales lo había drogado y robado. Relató que la mujer le preparó un fernet y, después de beberlo, perdió el conocimiento. Despertó cerca de las cinco de la tarde con fuertes dolores de cabeza y descubrió que su departamento había sido vaciado.
El botín fue amplio: un millón de pesos en efectivo, un iPhone 11, una licuadora, una juguera, una filmadora Sony, el CPU de su computadora y dos valijas repletas de ropa y objetos personales. Cuando la llamó para reclamarle, la respuesta fue una extorsión: “Pagame un millón y medio de pesos y te devuelvo todo”.
Tras la viralización de su rostro, comenzaron a aparecer nuevas víctimas. El 8 de abril, otra denuncia situó a la joven en Nuñez, en una zona de alto poder adquisitivo cercana a la cancha de River. Allí se llevó 150 mil pesos y dispositivos electrónicos antes de desaparecer.
Pero uno de sus golpes más audaces ocurrió el 30 de mayo en Caballito, donde robó 4.000 dólares y realizó transferencias bancarias por más de 5,5 millones de pesos. Su capacidad para moverse entre distintos barrios porteños sin dejar rastros aumentó la presión sobre los investigadores y generó alarma entre las víctimas.
Del mito al apodo: el origen de la “Araña Culona”
Aunque su modalidad delictiva encaja en el término “viuda negra”, el apodo que terminó de instalarla en el imaginario popular llegó después: “araña culona”. La imagen tomada en la comisaría, difundida tras su arresto, generó miles de comentarios irónicos en redes sociales, consolidando su perfil mediático y convirtiéndola en un personaje viral más allá de su prontuario.
Lobo, de 20 años, permaneció detenida en la Subcomisaría 71° de Pomona hasta el lunes, cuando una comisión de la Policía Federal la trasladó a la Ciudad de Buenos Aires. La Justicia rionegrina autorizó la extradición al no existir causas pendientes en la provincia. Ahora se espera la formalización de las acusaciones para conocer nuevos detalles de los delitos por los que se la investiga.
Fuente: Medios.
