Borja demandará al colegio de sus hijos por falsa acusación de maltrato infantil

El delantero colombiano de River Plate, Miguel Borja, ha decidido tomar acciones legales contra el Instituto Grilli de Canning, luego de una denuncia infundada por maltrato físico hacia sus hijos de 7 y 10 años. 

La denuncia fue interpuesta por la directora del colegio después de que uno de los niños manifestara temor de recibir un castigo por parte de su padre.

Sin embargo, tras las investigaciones correspondientes y los exámenes realizados por profesionales del Servicio de Niñez, no se encontraron indicios de violencia. Tanto el personal médico como las entrevistas psicológicas realizadas a los menores confirmaron que los niños no sufren maltrato.

Borja, al sentirse agraviado por esta falsa denuncia, decidió iniciar acciones legales para salvaguardar la integridad de su familia y limpiar su nombre tras el incidente.

El Instituto Grilli, ubicado en Canning, fue el centro de este episodio al que Borja y su pareja tuvieron que enfrentar. Afortunadamente, las pericias concluyeron rápidamente que no había evidencia de ningún tipo de violencia o maltrato dentro del hogar del futbolista.

"Joel (el menor) refirió ante su maestra de segundo grado que sufría violencia física" y que le habría contado que "cuando se portaban mal tanto él como su hermano Samuel, sus padres les pegaban con cinturones en las piernas". A continuación, quien está a cargo del instituto cuenta que "el niño estaba muy angustiado ya que, durante la primera hora de clase, su maestra le llamó la atención por su comportamiento" y que ahí "rompió en llanto" al revelar que no quería que llamaran a su padre por los supuestos actos que ocurrían en el hogar.

Además, se menciona que según Joel estas situaciones eran "recurrentes" y que no había habido algo "reciente". Por otro lado, tal como quedó registrado en el relato transcripto en el formulario de denuncia de hechos de violencia familiar, la vicedirectora habría visto este martes al hijo menor del delantero "con una raspadura en la zona de arriba de la rodilla", sin identificar cuál de las dos era.

A favor de Borja, la escala de predicción de riesgo de violencia que figura en la denuncia le da buenos resultados, sin casilleros tildados entre los que se destacan una separación o acoso reciente, el quebrantamiento de una orden de protección vigente, amenazas graves y agresión sexual, entre otros. Tampoco le aparecen denuncias previas, tales como tenencia de armas, conductas violentas con esposa o amigos, consumo excesivo de alcohol, etc.

Fuente: Medios