El oleoducto Vaca Muerta Oil Sur (VMOS) se consolidó como un motor clave de empleo y desarrollo económico en Río Negro. Con 2.550 trabajadores directos, entre ellos 130 mujeres, y 300 operarios dedicados a la construcción portuaria en Sierra Grande, el proyecto refleja el impacto positivo del desarrollo energético sobre la región.
La obra avanza en cuatro frentes principales: la soldadura de ductos entre el sur del río y Sierra Grande, la construcción de la cabecera de bombeo en Allen, la estación intermedia en Chelforó y la terminal portuaria de Punta Colorada. Se espera que el oleoducto esté operativo a finales de 2026. Además, YPF evaluará en las próximas semanas la construcción de un segundo ducto paralelo para aumentar la capacidad de exportación desde Vaca Muerta.
Entre el 80% y el 85% de los puestos son ocupados por mano de obra rionegrina, y si se suman los empleos indirectos vinculados al consumo de bienes y servicios, el VMOS genera más de 5.000 puestos en toda la provincia.



Sierra Grande y la costa atlántica, protagonistas del impacto económico
Sierra Grande se convirtió en el epicentro de esta transformación: la demanda habitacional disparó la actividad con más de 150 alquileres activos para los trabajadores, 237 plazas ocupadas y una proyección que alcanzará las 1.000 personas en el corto plazo.
El efecto económico se extiende a la costa atlántica. En Las Grutas, la ocupación hotelera atribuible a las empresas energéticas representa entre el 50% y el 60% de la demanda permanente, mientras que en San Antonio Oeste alcanzó el 90% durante la temporada, impulsando el comercio y los servicios locales.
El dinamismo también se refleja en la apertura de negocios: en 2025, Sierra Grande registró 65 nuevas habilitaciones comerciales, superando las 51 del año anterior. San Antonio y Las Grutas suman 110 nuevos comercios entre gastronomía, transporte, inmobiliarias, alojamiento y servicios complementarios como lavanderías y limpieza. Más de 70 empresarios locales participaron de capacitaciones para proveer bienes y servicios vinculados al proyecto, mientras siete nuevas empresas ya se instalaron en la zona. En el Alto Valle, más de 200 compañías mantienen vinculación con las cadenas de construcción del VMOS.

Un proyecto estratégico para la provincia y el país
Con una inversión total de 3.000 millones de dólares y un financiamiento a cargo de YPF, Pan American Energy, Vista Energy, Pampa Energía, Pluspetrol, Chevron, Shell, Tecpetrol y GyP, el oleoducto garantiza ingresos superiores a 1.000 millones de dólares para Río Negro en los próximos 13 años.
Según el gobierno provincial, se espera que hasta 2030 se alcance pleno empleo para los trabajadores de la UOCRA, consolidando a Río Negro como un referente en generación de oportunidades y en la integración de infraestructura estratégica para Argentina.
Fuente: Medios.