Pablo Parra condenado como culpable de la muerte de Agaustina
El jurado popular se inclinó por la culpabilidad por unanimidad, luego de analizar las pruebas presentadas por ambas partes.
Ya hay condena para el único culpable de la muerte de Agustina Fernández, la estudiante pampeana de Medicina que fue víctima de un brutal ataque en la ciudad de Neuquén. Tras los alegatos, el jurado popular se inclinó por la culpabilidad por unanimidad, luego de analizar las pruebas presentadas por ambas partes y deliberar el veredicto en privado.
Parra, vecino de Agustina, trabajador petrolero, mostró obsesión hacia ella y no toleró su rechazo como pareja.
El veredicto asegura que pasará sus días tras las rejas, una vez que se determine la pena y la sentencia sea firme. El jurado lo encontró responsable del ataque que provocó la muerte de la joven estudiante.
Durante el juicio, la Fiscalía, la querella y la defensa expusieron sus argumentos basados en las pruebas y testimonios recopilados. Los acusadores solicitaron la declaración de culpabilidad por femicidio, mientras que la defensa abogó por la inocencia de Parra.
El jurado respaldó la versión de la Fiscalía, concluyendo que Parra perpetró el ataque con extrema violencia motivado por el rechazo de Agustina y los celos al enterarse de un encuentro de la joven con otro hombre. Tras el crimen, Parra intentó encubrirlo denunciando un falso robo para distraer a la policía.
A pesar de los argumentos de la defensa, que cuestionaba la imparcialidad de los acusadores y la investigación, el jurado no se dejó influenciar. Tras el veredicto de culpabilidad, se vivieron momentos emotivos en la sala de audiencias, donde familiares y amigos de Agustina expresaron su dolor y reclamaron justicia.
El caso de Agustina Fernández pone de manifiesto el trágico desenlace de una joven que buscaba la libertad y el derecho a elegir. Su asesinato, perpetrado por un vecino obsesivo y violento, refleja el patrón de "mía o de nadie" que lamentablemente se repite en casos de femicidio.
Agustina, de 19 años, llegó a la ciudad persiguiendo sus sueños académicos y encontró la muerte de forma inesperada y violenta el 2 de julio de 2022 en Cipolletti, tras tres días de agonía en el Hospital Pedro Moguillansky.
Fuente: Medios