La marcha al lago Escondido en "defensa de la soberanía" traería confrontaciones
La nueva caminata al Lago Escondido es entre el 30 de enero y el 4 de febrero. El gobierno de Río Negro busca evitar todo tipo de altercados.
Es la séptima movilización que organizaciones sociales, políticas y gremiales realizan al lugar, donde tiene su propiedad el empresario inglés Joe Lewis.
Los pobladores de El Foyel, un paraje rionegrino situado en inmediaciones al lago y a 80 kilómetros de Bariloche, expresaron su preocupación por la presencia de los autoconvocados quienes, en ediciones anteriores, provocaron desmanes en alambrados y viviendas, mataron animales e incluso los agredieron.
El gobierno provincial tomó nota y diseñó un esquema de prevención que se implementará antes del arribo de los manifestantes y se mantendrá durante toda la extensión de la movilización.
Así lo confirmaron fuentes gubernamentales al asegurar que "el objetivo es que se respeten los derechos de uno y otro lado, no haya confrontaciones ni situaciones de violencia, al tiempo que se respeten los bienes de los pobladores".
La gobernadora Arabela Carreras, en diálogo con medios de prensa, lamentó el "desánimo" que provoca la movilización en los pobladores por los perjuicios que produce en sus tierras la movilización multitudinaria.
Carreras también indicó que lo importante "es que no haya confrontación, que no se produzcan daños en las propiedades, que los vecinos no teman por sus alambrados o animales que es lo primero que pasa, que no haya confrontación entre personas".
"Después la libre expresión en democracia hace que todos veamos las distintas visiones sobre los distintos temas", remarcó la gobernadora.
Los vecinos, 30 de los cuales firmaron un petitorio, advirtieron sobre "los grupos violentos que, bajo el pretendido discurso de un derecho, ejercen el terrorismo para imponer sus ideas".
"Nuestra tranquilidad queda a expensas de grupos violentos, nos han roto alambrados, lesionado vecinos, carneado animales. Nunca pudimos tener un responsable, siempre ocultos entre el tumulto y la clandestinidad", afirmaron.
Para contrarrestar las críticas, organizaciones gremiales y políticas de Bariloche afirmaron que "no es un enfrentamiento entre vecinos sino una defensa de la soberanía y la democracia".
"Este no es un enfrentamiento con vecinos, como se ha querido instalar, sino una marcha que tiene que ver con la lucha por la defensa de la soberanía territorial de los bienes naturales que nos pertenecen a todos", expresó el dirigente gremial Jorge Molina de la CTA.
El objetivo de la movilización -y de las seis ediciones anteriores- es exigir la apertura del camino de Tacuifí para acceder al lago Escondido.
La Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (Fipca) es la principal impulsora de esta marcha desde hace varios años y su titular aseguró que quieren "señalar desde dónde actúa el poder real que condiciona a nuestra Nación a la dependencia y que tuvieron un resultado insoslayable en materia política, mediática y jurídica. Ahora, todo el pueblo argentino sabe que sucede allí, en ese rincón usurpado de nuestra Patagonia".
Señalaron que "queremos que se cumpla la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Río Negro y de la Cámara de Apelaciones de Bariloche, dónde exigen habilitar el Camino del paraje Tacuifí por su carácter de acceso público".
Fuente Infobae