El damnificado fue contactado por una venta a través de Whatsapp, los estafadores fingieron un pago equivocado y luego un llamado del banco para quedarse con los datos y sacar un crédito a su nombre.
El hombre se hizo pasar por un empleado de Mercado Libre y, en el lapso de una hora, vació varias cuentas de la víctima. Le pidió ayuda al portero de su edificio y éste le advirtió que estaba siendo estafada.